La plantilla de la empresa Linorsa, en segunda jornada de la huelga indefinida que dio comienzo en la capital ourensana este lunes, se concentraron ante el Consistorio ourensano este martes para trasladar al Concello la situación de retraso en el abono de salarios por parte de la empresa que siguen sufriendo.
Trabadoras y trabajadores esta empresa reclamaron al Gobierno municipal que sancione a la empresa y le rescinda el contrato de adjudicación del servicio de limpieza en varias instalaciones municipales que tiene Linorsa.

La plantilla reclama que el Concello haga valer lo establecido por la ley que exige a las empresas adjudicatarias estar al corriente en el abono de las nóminas de los trabajadores lo mismo que en el de las cuotas de la Seguridad Social y otros trámites laborales inherentes a las plantillas, extremo que Linorsa entienden que no cumple.
Por contra, el Concello de Ourense si liquida a la empresa mensualmente el importe de la concesión. Por lo que los trabajadores y las organizaciones sindicales que los defienden, UGT, Comisiones Obreras y CIG, entienden que la empresa está haciendo una desviación de dinero consignando a otros gastos los ingresos provenientes del Concello de Ourense por la prestación de dicho servicio.
La plantilla exige también que el Gobierno municipal se atenga al acuerdo del pasado Pleno de 7 de este mes, y exija a la empresa el pago de los atrasos y que la situación de demora en el abono de las nóminas de octubre y noviembre no vuelva a producirse.

Los trabajadores de Cavima van este miércoles a Minas en Santiago

Por otra parte, los trabajadores de la pizarrera Cavima de Vilamartín de Valdeorras se trasladarán a primera hora de este miércoles a Santiago de Compostela, donde tienen previsto concentrarse ante la delegación de la Consellería de Industria de la Xunta de Galicia continuando con sus protestas y reivindicaciones.

Los trabajadores pretenden llegar al director xeral de Minas de la Xunta, Bernardo Tahoces, con quien quieren entrevistarse para pedirle que revoque la orden de paralización de la actividad minera de la pizarrera Cavima que supone que 63 familias valdeorresas se queden sin trabajo.