El Pleno de septiembre de la Deputación de Ourense, a celebrar este viernes, aprobará la creación de una comisión de investigación en el seno de la institución provincial, que habrá de garantizar la máxima transparencia en la gestión de los proyectos Daredo y Deputrans relacionados con la depuración de aguas en varios concellos de esta provincia.
Así lo anunció el propio presidente de la Deputación, Manuel Baltar, en una comparecencia de prensa ese miércoles.

La comisión habrá de analizar las presuntas irregularidades que ha detectado la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude, la OLAF, cuyos técnicos se desplazaron a Ourense advertidos por una denuncia anónima de presuntas irregulares cometidas por la Deputación en la gestión de dichos proyectos.
La denuncia anónima podría haber sido realizada por un empresario que trabaja, precisamente, en el ámbito de la depuración de aguas.

Aún antes de que la comisión de investigación que se ha de crear concluya su trabajo, Manuel Baltar ya anunció que la Deputación de Ourense presentará alegaciones a todas las consideraciones que realizó la OLAF en su informe, ya que la Deputación entiende que "non existen tales irregularidades", señaló su presidente.
Las alegaciones, una vez redactadas, serán remitidas al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, y serán acompañadas de "probas contundentes que demostrarán, segundo os servizos técnicos e xurídicos da Deputación, a falsidade das imputacións efectuadas pola OLAF", señaló Manuel Baltar.

La Deputación de Ourense se ve en la tesitura de evitar que el informe, pese a no tener carácter vinculante, se haga firma, pues a raíz de él el Ministerio de Hacienda ha comunicado a la Deputación ourensana que el inicio de procedimiento de reintegro de dichas subvenciones, que totalizarían algo más de los 10 millones de euros.