Trabajadores del Complejo Hospitalario de Ourense han presentado por Registro del CHOU un nuevo escrito por el que quieren saber del grado de integridad y estabilidad estructural del Santa María Nai, así como de los informes a los que en 2004 se refirió el entonces gerente del CHOU, José Troncoso, y uno anterior de 1999 que se pronunciaba en similares términos a los que manejó 5 años después el entonces gerente del Complejo Hospitalario.
Este escrito sigue al que presentaron los trabajadores a finales de la semana pasada en el Concello de Ourense, y del que todavía no tienen respuesta.

El escrito presentado ahora por Registro del CHOU va dirigido al Comité de Seguridade e Saúde da Área de Saúde de Ourense; a la técnico de Seguridade Ana Blanco; y a los delegados de Prevención da Área de Saúde de Ourense.
Por una parte se les pide que “se haya un informe con la evaluación de riesos de este Hospital con el fin de ser conocedores de la situación real de dicho edificio”. Se pide “cumplida información” al respecto, y se recuerda que “la unidad de Prevención debe velar por la seguridad de los trabajadores”.

Aluden en su escrito los trabajadores a las, dice, “contradicciones” que se producen entre los actuales informes que manejan los responsables del CHOU, y los que se manejaban en 1999 y en 2004.
Concretamente se recuerda que en 2004, siendo gerente el doctor José Troncoso, el máximo responsable del complejo sanitario “afirmaba que el Santa María Nai tenía graves deficiencias estructurales que no aconsejaban destinarlo a una actividad tan dinámica como la hospitalaria”.
Y añaden que, “por otras informaciones, sabemos que esta opinión era ya expresada por Gerencias anteriores”, concretamente del año 1999.

Los trabajadores denuncian que el Santa María Nai de esta ciudad da claras muestras en todas y cada una de sus plantas de problemas estructurales, que se evidencian en grietas de considerable calado y longitud, suelos repisados que dejan tabiques colgando y marcos y puertas torcidos o descuadrados. Lo que hace pensar a estos trabajadores que alguna planchada u otros componentes de la estructura del edificio puedan haber sufrido o estar sufriendo desplazamientos.