Mientras Interior no resuelva el caso del interventor que se jubiló ya en 2010, pero para el que todavía ahora el Ministerio no tiene relevo, el cuartel de la Guardia Civil de Xinzo de Limia seguirá rematado pero no operativo es decir, cerrado. Según Pérez Bouza, “a cal e canto”.
Una situación que, denunció el senador nacionalista, perjudica a los agentes que deben continuar en unos locales que no reúnen las condiciones necesarias, pues se encuentran en un estado “lamentábel”, asegura.

Interior dice respecto a este cuartel que hubo que redactar un proyecto modificado, y que se está a la espera de firmar un contrato para su ejecución.
En cualquier caso, al igual que los cuarteles de Ames, Santa Comba, Oleiros, Mos, Porriño y A Garda, todos ellos en Galicia, aún rematados siguen esperando su apertura porque no hay interventor.
En la respuesta que el Ministerio acaba de dar al senador del BNG, se le explica que “o interventor que ía a proceder á recepción das obras se xubilou en decembro de 2010”.
Y se añade que “se está á espera de que se designe formalmente un novo interventor para recepcionar as obras e determinar a data da súa inauguración”.

En ningún caso Interior establece ninguna previsión de llegada del relevo y desbloqueo de la situación.