Están dispuestos, dicen en un escrito remitido al propio presidente del Consello Regulador de la Denominación Valdeorras, de convocarla por su cuenta y movilizar a cuantos sectores de la comarca haga falta. Aseguran que transcurrido "un tempo máis que prudencial", el presidente debe, como mínimo, paralizar el despido improcedente (dispuesto como tal por los tribunales laborales) del trabajador Felipe González Macías.
Con esta postura, los bodegueros se suman a las críticas hechas ya con antelación por el sindicato Unións Agrarias, que denunció en su día que, pese a ser declarado el despido improcedente, el presidente del Consello Regulador pretendía llevarlo a cabo a costa del dinero del propio organismo. Ahora, los bodegueros dicen quere "que se nos explique quen vai a pagar esta mala xestión até o día de hoxe".
En el escrito, en el que figuran además de algunos viticultores a título particular bodegas como Don Mario, Ruchel, A Tapada, Señorío de Roblido, Germán Salgado, y sociedades cooperativas como Virgen de Las Viñas de A Rúa, se le recuerda al presidente que "representa aos sectores que o compoñen e non os intereses políticos ou de outra índole da Consellería de turno, e menos aínda do capricho de cinco persoas".
Se le insta a que "non se nos ignore e menosprecie como si o Consello Regulador fose propiedade de dúas ou tres persoas", con la advertencia de que, de persistir el presidente en el despido del trabajador así como de no convocar la correspondiente reunión para debatir el asunto, irían a las movilizaciones y forzarían la reunión pretendida.
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